La clasificación de los recursos naturales dependerá del criterio que se escoja para tal objetivo. De esta manera, una primera clasificación es aquella en la que se tiene en cuenta si el objeto de consumo es un ser vivo o no. Desde este punto de vista los recursos naturales pueden ser bióticos o abióticos. En cambio, si el criterio es el hecho de si hay posibilidad de volverlos a utilizar o no, entonces tendrá que hablarse de recursos naturales reutilizables o no reutilizables.

Sin embargo, la clasificación más utilizada a la hora de diferenciar los recursos naturales es la que los agrupa en recursos renovables o recursos no renovables. Esta clasificación se basa en su disponibilidad en el tiempo, su tasa de generación (o regeneración) y su ritmo de uso o consumo. Es decir, se podría hablar de recursos naturales con un ciclo cronológico de renovación corto (renovables) o bien con un ciclo cronológico de renovación largo (no renovables). Se entiende por ciclo cronológico de un recurso el tiempo que se requiere para remplazar su cantidad utilizada para una aplicación determinada.

a) Recursos naturales renovables

Dentro de este grupo están los recursos de tipo biótico (flora, fauna y suelo), aunque actualmente en algunos casos se está produciendo un uso excesivo y/o inadecuado, que puede hacer que pierdan esta consideración debido a que sus ciclos de regeneración queden por debajo de su tasa de extracción. También se incluyen dentro de los recursos renovables la luz solar, el viento o el agua, los cuales se pueden calificar como inagotables.


b) Recursos naturales no renovables

Los recursos naturales no renovables son materiales distribuidos irregularmente por la Tierra en una serie de depósitos limitados y con un ritmo de regeneración muy inferior a las tasas de extracción o explotación actuales. Estos recursos naturales geológicos (minerales) se acostumbran a dividir entre aquellos que son energéticos y los que no lo son. Todos se pueden utilizar como materias primas, pero los energéticos, tal como dice su nombre, también son fuentes de energía. Dentro de este último grupo están los combustibles fósiles (carbón, petróleo y gas natural) y los nucleares, con el uranio al frente.